Ante el auge de la realidad virtual, la Interpol plantea la creación de comisarías virtuales para abordar el desafío del metacrimen, una nueva categoría delictiva emergente en el metaverso. Estos espacios en realidad virtual buscan ofrecer servicios similares a las estaciones de policía físicas, permitiendo la denuncia de crímenes, presentación de quejas y la realización de reuniones comunitarias.

El informe de Interpol destaca la necesidad urgente de que las agencias de aplicación de la ley establezcan presencia policial en el metaverso. Este paso es crucial para facilitar la denuncia de metacrímenes y posiblemente brindar una nueva vía para informar sobre crímenes del mundo físico.

Con un estimado del 15% de niños de cinco a diez años utilizando la realidad virtual, el metaverso ha ganado considerable tracción. A medida que su uso continúa integrándose en la vida diaria, el potencial aumento del metacrimen es significativo. Este fenómeno abarca desde robos y fraudes virtuales hasta delitos más graves como el tráfico de drogas y el terrorismo.

El desafío principal contra el metacrimen es que opera en un ámbito fuera de las leyes y limitaciones físicas tradicionales, dificultando su rastreo e investigación sin una presencia policial en el metaverso.

Esta noticia no es la única relacionada con la temática, ya que el pasado 31 de diciembre desde Crypto Bureau también nos hicimos eco de cómo los agentes de la ley estaban ya trabajando en si considerar o no los crímenes en el metaverso como actos punible.

La propuesta de Interpol busca hacer que los servicios policiales sean más accesibles. Con una presencia designada en el mundo virtual, los individuos pueden informar fácilmente sobre metacrímenes y recibir apoyo de oficiales capacitados.

Esta iniciativa no solo brinda seguridad a los usuarios, sino que también estrecha el vínculo entre los mundos físico y virtual, permitiendo la posibilidad de informar sobre crímenes del mundo físico con conexiones al metaverso.